¿Por qué mi pareja no me da lo que necesito?

Introducción

En el viaje de las relaciones amorosas, es común encontrarnos con momentos en los que nos preguntamos: ¿Por qué mi pareja no me da lo que necesito? Estas interrogantes pueden generar incertidumbre, frustración y dudas sobre la solidez de la relación. Como psicóloga especialista en parejas, entendemos que este es un tema delicado que merece una exploración cuidadosa y comprensiva. En este artículo, abordaremos las posibles razones detrás de esta sensación, así como estrategias para enfrentarla y fortalecer la conexión emocional con tu ser amado.

A menudo, una vez que nuestra relación ha pasado la etapa de ‘luna de miel’, pasamos gran parte de nuestro tiempo en nuestras relaciones preguntándonos por qué nuestra pareja no nos está dando lo que necesitamos. ¿Cómo es posible que esta persona ‘perfecta’ que nos hizo tan felices ahora nos haga tan infelices? Si sus relaciones son lo suficientemente largas como para pasar esta etapa, lo que significa que están juntos durante al menos un año, probablemente comience a sentir que, en ocasiones, su pareja no le da lo que necesita. En una relación a largo plazo, este sentimiento puede afectar la mayor parte de su tiempo juntos, burbujeando bajo la superficie o explotando en una acalorada lucha por el poder. Podríamos añorar los días en que nuestra pareja lo sentía todo por nosotros, cuando la mera mención de su nombre hacía que nuestro corazón latiera más rápido. Pero una vez que todo se haya calmado y nos hayamos calmado un poco, es posible que nos preguntemos qué sucedió.

¿Por qué siento que mi pareja no me comprende?

Razón #1: Diferencias en la forma de amar

Cada individuo tiene una manera única de expresar y recibir amor. Algunas personas valoran los gestos físicos, mientras que otras dan importancia a las palabras de afirmación o al tiempo de calidad. Cuando las parejas no comprenden estas diferencias, puede surgir la sensación de que uno no está recibiendo lo que necesita. La clave aquí es reconocer que no todos experimentan y demuestran el amor de la misma manera, y es esencial comunicarse sobre las preferencias personales.

Razón #2: Expectativas no comunicadas

A menudo, las expectativas no expresadas pueden dar lugar a malentendidos y desilusiones en una relación. Si asumimos que nuestra pareja sabe lo que necesitamos sin haberlo comunicado, estamos creando una base para la frustración. La comunicación abierta y honesta es la base de cualquier relación sólida. En lugar de esperar a que tu pareja adivine tus necesidades, exprésalas de manera clara y respetuosa.

¿Por qué mi pareja no me da lo que necesito?

1. Falta de comunicación: A veces, la razón por la que tu pareja no te da lo que necesitas es simplemente porque no sabe lo que necesitas. Es importante comunicar claramente tus necesidades y deseos a tu pareja, en lugar de esperar que adivine lo que quieres. Si no estás seguro de cómo expresar tus necesidades, un terapeuta de pareja puede ayudarte a aprender habilidades de comunicación efectivas.
2. Diferentes expectativas: Otra razón por la que tu pareja puede no estar satisfaciendo tus necesidades es que tienen diferentes expectativas sobre lo que debería ser una relación. Es posible que tu pareja no se dé cuenta de que lo que estás pidiendo es importante para ti, o puede que no esté dispuesto o no sepa cómo satisfacer tus necesidades. En este caso, es importante tener una conversación abierta y honesta sobre lo que esperas de la relación.
3. Problemas personales: A veces, los problemas personales de tu pareja pueden interferir en su capacidad para satisfacer tus necesidades. Por ejemplo, si tu pareja está pasando por un momento difícil en el trabajo o está lidiando con problemas de salud mental, puede que no tenga la energía o la capacidad emocional para apoyarte de la manera que necesitas. En este caso, es importante ser comprensivo y ofrecer apoyo a tu pareja, mientras trabajan juntos para encontrar soluciones.
4. Falta de compromiso: Finalmente, es posible que tu pareja simplemente no esté comprometida con la relación de la misma manera que tú lo estás. Si tu pareja no está dispuesta a trabajar contigo para satisfacer tus necesidades, puede ser una señal de que la relación no es saludable o no es sostenible a largo plazo.

Pero, ¿Cómo ha sucedido esto?

Los psicólogos solemos decir que hay tres negocios en la vida. Tu propio negocio, el negocio del otro (tu pareja, amigos, etc.) y el negocio de dios/universo. Entonces, cuando piensas o le dices a tu pareja: «Quiero que comas más sano», o «Necesitas pasar más tiempo con los niños» o «No me das lo que necesito» y varias otras versiones de lo mismo, (p. ej., “estás demasiado emocional”, “no limpias después de ti mismo”) estás, en realidad, en el negocio de tu pareja. Estar en cualquier otro negocio que no sea el suyo resultará en sentirse estresado y miserable.

Si lo pensamos bien, es posible que nos encontremos con nuestra tendencia a quejarnos interminablemente del mismo tema con nuestra pareja. ¿Cuántas veces le hemos dicho a nuestra pareja versiones de lo mismo?

Es posible que lo hayas dicho de forma clara o agresiva, o que te hayas dado por vencido y hayas reaccionado con un comportamiento pasivo-agresivo.

No hace falta ser un genio para darse cuenta de que este comportamiento repetitivo, criticar y culpar no te da lo que quieres. Sin duda, incluso podría haber empeorado la situación.

Como dice Amby Burfoot (maratonista estadounidense), “para llegar a la meta, tendrás que probar muchos caminos diferentes”.

El punto clave que debe saber es que la única forma de encontrar un nuevo camino para el crecimiento y el cambio en su relación es trabajar en su propio negocio. Para pensar en esto, responde las 5 preguntas a continuación. Esas preguntas requieren autoconciencia, sentido de seguridad para explorar y coraje. Todo lo cual te ayudará a alejarte del lugar de víctima a una persona mucho más empoderada. Al final del día, te ayudará a crear la relación que deseas.

5 preguntas para cambiar tu mentalidad:

1. ¿En qué áreas de mi vida no le doy a mi pareja lo mismo que a mí también me gustaría de ella?

Una respuesta común a esta pregunta es “¡pero doy! ¡Por eso estoy frustrado!”. Quiero asegurarte, que tal vez lo das, sea lo que sea, en un área de tu vida, pero descuidas darlo en otra. Por ejemplo, si su queja es sobre la ausencia de su pareja en la vida familiar, verifique con usted mismo dónde está usted ausente. ¿Tal vez cuando tu pareja inicia la intimidad, tal vez con la familia extendida o con una vida social que a tu pareja le gusta mucho? ¿Sientes que tu pareja controla las finanzas y los gastos? Me pregunto dónde no está equilibrado el control por usted… ¿quizás la relación con la familia extendida, la relación con los niños, el sexo? Si el problema es sobre el orden y la organización del hogar, vale la pena revisar sus propias responsabilidades. ¿Eres ‘ordenado’ y te ocupas de la administración financiera familiar?

Quiero invitarte a cruzar el puente hacia el mundo de tu pareja y verlo desde su perspectiva. Piense en dónde podrían experimentar el mismo problema que planteó en un aspecto diferente de su vida.

Cuando tenga una comprensión clara de sus propios comportamientos, concéntrese en ellos. Como dijo Gandhi, ‘sé el cambio que deseas ver’.

2. ¿Qué es exactamente lo que quiero (en lugar de lo que no quiero)?

Estamos, como seres humanos, demasiado enfocados en lo negativo: en lo que no estamos obteniendo, luego en lo que tenemos o lo que queremos. Es posible que tu pareja no te dé lo que quieres en un área de la vida, pero no dejes que eclipse todas las cosas maravillosas que hace. Lo que me pareció interesante es que al hacer esta pregunta a mis clientes es que empiezan a explicar más lo que no quieren. “No quiero que me critique cerca de los niños”, “Quiero que deje de decirme lo que debo hacer”, “Odio cuando llega tarde y lo estoy esperando listo”, “No No quiero que se queje todo el tiempo y esté de mal humor”, por mencionar algunos ejemplos.

Aquí está el oro: ¡en lo que sea que te hayas centrado, es lo que va a crecer! Entonces, si continúa enfocándose en quejas, control, tardanzas, etc., no importa qué palabras vienen antes de eso («No quiero…»), el cerebro registra solo las palabras principales (en negrita arriba) y esto es que va a crecer.

Quieres cambiarlo? ¡Di lo que quieras! Sea muy específico con el comportamiento deseado y use palabras positivas. En Imago Terapia de Relación decimos que debajo de cualquier queja hay un deseo y un anhelo de conexión.

Así que continúa con los ejemplos anteriores, podría ser “Me gustaría que me apoyaras cerca de los niños y que cualquier desacuerdo que tengamos lo discutamos con respeto y en privado”, “Me gustaría que confiaras en mis habilidades y juicio. Será lindo escuchar ‘confía en ti mismo, puedes hacerlo’ o ‘Agradezco la forma en que piensas sobre esto’”, “cuando llegue a casa del trabajo será lindo saludarnos con una sonrisa y un abrazo” .

¿Puedes ver lo diferente? Las palabras negativas aumentan las defensas, los deseos positivos aumentan la cooperación.

3. ¿Cómo me sirve el comportamiento específico de mi pareja?

Puedo escuchar tu respuesta «¡No lo hace!» Pero mantengamos la curiosidad. Incluso los comportamientos más molestos pueden, consciente o inconscientemente, servirnos a nosotros y a nuestra agenda de relaciones. Por agenda de relación me refiero al modelo de relación que experimentamos, observamos e internalizamos en nuestra infancia. El equipaje que traemos hasta el presente es tema para otro artículo. Para este ejemplo, diré que si en nuestra historia un padre fue el ‘bueno’ y el otro el ‘malo’, internalizamos esta experiencia e inconscientemente nos aseguraremos de que somos los ‘buenos’. Al sentirse víctima del comportamiento de la pareja y creer que hizo su parte, simplemente continúa con la agenda de su relación.

Lo mismo ocurrirá con los temas relacionados con el control, la dependencia, el dinero, las entradas, la paternidad y el sexo.

4. ¿Qué necesita la relación de mí?

En Imago Terapia de Relación reemplazamos la pregunta común de ‘qué necesito de la relación’, a ‘qué necesita la relación de mí’. La primera busca gratificación, la carta enfocada en la relación. Este es un cambio de paradigma del individuo a la relación, basado en el entendimiento de que cuando la relación es mejor, los individuos se sienten mejor y no al revés. En otras palabras, cuando te preocupas lo suficiente por tu relación, tú como individuo te beneficiarás más.

Piensa en tu relación, ¿qué necesita de ti? ¿Es mostrar más, iniciar más, estar más presente emocional y físicamente, o es contener más, autorregularse, mostrar vulnerabilidad en lugar de ira y agresión?

Siempre que su actitud defensiva sea (ataque o evasión y todo lo demás), usted activa la actitud defensiva de su pareja. Significa que el cerebro de tu pareja no te percibe como una pareja segura en ese momento. No quiere decir que seas un peligro para tu pareja, pero el cerebro de tu pareja lo percibe como tal y el sistema nervioso central reacciona en consecuencia. Con una mano en el corazón, ¿tu pareja te percibe como una pareja segura? ¿Qué comportamientos específicos requiere usted para que esta situación cambie?

5. ¿Cómo puedo aclarar mis límites?

Tal vez tu pareja hizo algo que realmente te molestó. Incluso puede sentir que él o ella cruzaron un límite con la forma en que habló o se comportó. Tal vez no se sienta seguro. Establecer límites claros para lo que es aceptable o no, ya sea física o emocionalmente, es importante para su bienestar. Puede hacerlo con integridad, asertividad y respeto por su pareja. Hable de ello con su pareja. Comparta sus pensamientos y sentimientos al respecto, y cuáles son sus deseos. Modele el comportamiento que necesita. Y no dude en pedir ayuda a su médico de cabecera, a los terapeutas de relaciones de Imago y a otros profesionales de las relaciones. Hay mucha ayuda por ahí, solo necesita comunicarse.

“El mayor regalo que le puedes dar a alguien es tu propio desarrollo personal. Solía ​​decir: “Si tú me cuidas, yo te cuidaré. “Ahora digo, yo me cuidaré por ti, si tú me cuidas a ti”. —Jim  Rohn

Como puede ver, todas las preguntas y consejos se refieren a cómo manejar su propio negocio. Haz eso, consistentemente, durante tres meses, y te darás cuenta de tu propio papel por no obtener lo que quieres en tu relación. Los resultados de enfocarte en tu autoconciencia y cambio, desde un lugar de crecimiento y no de condicionamiento o negociación (es decir, ‘yo haré y luego tú…’), podrían sorprenderte. Entonces, tendremos que pensar en el reto de recibir lo que quieres. ¡Disfruta del proceso!

¿Cómo podemos abordar esta situación?

Estrategia #1: La comunicación efectiva

La comunicación es la columna vertebral de cualquier relación exitosa. Si sientes que tu pareja no te está proporcionando lo que necesitas, es esencial hablar al respecto. En lugar de acusaciones o críticas, utiliza «yo» en tus declaraciones para expresar tus sentimientos y necesidades. Por ejemplo, en lugar de decir «Siempre me ignoras», puedes decir «Me siento un poco desatendido en los últimos días, ¿podemos hablar sobre cómo podríamos pasar más tiempo juntos?».

Estrategia #2: La empatía y el entendimiento

La empatía es clave para entender las perspectivas y sentimientos de tu pareja. Tómate el tiempo para escuchar sin juzgar y tratar de ponerte en su lugar. A veces, lo que parece una falta de interés puede ser resultado de preocupaciones personales o estrés. Pregúntale cómo se siente y ofrécele tu apoyo.

Estrategia #3: La flexibilidad y el compromiso

Las relaciones requieren adaptación y compromiso. A medida que crecemos y cambiamos, nuestras necesidades también pueden evolucionar. Ser flexible y estar dispuesto a comprometerse puede ayudar a encontrar soluciones que satisfagan a ambos. Busquen juntos maneras de satisfacer las necesidades mutuas sin perder la individualidad.

¿Qué puedo hacer si mi pareja no me da lo que necesito?

1. Comunica tus necesidades: Como se mencionó anteriormente, es importante comunicar claramente tus necesidades y deseos a tu pareja. Si no estás seguro de cómo expresar tus necesidades, un terapeuta de pareja puede ayudarte a aprender habilidades de comunicación efectivas.
2. Trabaja juntos para encontrar soluciones: Si tu pareja está dispuesta a trabajar contigo para satisfacer tus necesidades, es importante trabajar juntos para encontrar soluciones. Esto puede implicar compromisos de ambas partes, como hacer cambios en la forma en que se comunican o pasan tiempo juntos.
3. Busca ayuda profesional: Si tu pareja no está dispuesta a trabajar contigo para satisfacer tus necesidades, o si sientes que la relación no es saludable, es posible que desees buscar ayuda profesional. Un terapeuta de pareja puede ayudarte a explorar tus sentimientos y opciones, y a tomar decisiones informadas sobre el futuro de la relación.

Aquí tienes algunos consejos para hablar con tu pareja sobre lo que necesitas:

• Elige un momento en el que ambos estéis relajados y sin prisa.
• Empieza por hablar de cómo te sientes. Explícale lo que necesitas y lo que te gustaría que cambiara.
• Sé específico y concreto. No digas «No me haces feliz». En su lugar, di algo como «Me gustaría que pasáramos más tiempo juntos» o «Me gustaría que me escucharas más».
• Sé respetuoso. Evita los ataques personales y céntrate en los comportamientos concretos que te molestan.
• Escucha lo que tiene que decir tu pareja. Intenta entender su punto de vista y por qué se comporta de la manera en que lo hace.
• Sé paciente. Puede llevar tiempo hacer cambios en una relación. No te desanimes si no ves resultados de inmediato.

Si tu pareja no está dispuesta a cambiar:

• Decide si estás dispuesto a seguir en la relación tal y como está.
• Si no estás dispuesto a seguir en la relación, habla con tu pareja sobre ello. Explícale que no estás contento y que estás pensando en terminar la relación.
• Si estás dispuesto a seguir en la relación, busca ayuda profesional. Un terapeuta puede ayudaros a comunicaros mejor y a resolver los problemas que están causando la falta de satisfacción en vuestra relación.

Preguntas Frecuentes (FAQs)

¿Qué hago si mi pareja sigue sin entenderme después de intentar comunicarme?

Si después de comunicar tus necesidades tu pareja sigue sin entender, es importante ser paciente y persistente. A veces, las personas necesitan tiempo para procesar la información. Mantén la calma y continúa la conversación en diferentes momentos si es necesario. Si la falta de entendimiento persiste, considera buscar la ayuda de un terapeuta de parejas.

¿Cómo puedo diferenciar entre una relación que necesita trabajo y una que simplemente no es compatible?

Distinguir entre una relación que necesita trabajo y una que no es compatible puede ser complicado. Si ambos están comprometidos a mejorar y crecer juntos, la relación tiene potencial. Sin embargo, si persisten la falta de respeto, la desconfianza y la negatividad, podría ser señal de incompatibilidad. En estos casos, la asesoría profesional puede ayudar a tomar decisiones informadas.

¿Qué papel juega la autocomprensión en este escenario?

La autocomprensión es esencial. Antes de señalar a tu pareja, reflexiona sobre tus propias necesidades y comunicación. ¿Estás expresando tus deseos de manera clara? ¿Comprendes tus propias expectativas? A veces, mejorando nuestra autocomprensión, podemos comunicarnos de manera más efectiva y recibir lo que necesitamos.

¿Cómo puedo saber si mis expectativas son realistas? 

Es importante tener expectativas realistas en una relación, pero puede ser difícil saber cuáles son realistas y cuáles no lo son. Un terapeuta de pareja puede ayudarte a evaluar tus expectativas y a trabajar para establecer expectativas saludables y realistas.

¿Cómo puedo comunicar mis necesidades sin parecer exigente o crítico? 

Es importante comunicar tus necesidades de una manera clara y respetuosa. En lugar de criticar a tu pareja o exigir que cambie, trata de expresar tus necesidades de una manera positiva y constructiva. Por ejemplo, en lugar de decir «nunca me escuchas», puedes decir «me gustaría que me escuches más cuando hablo».

¿Qué pasa si mi pareja no está dispuesta a trabajar conmigo para satisfacer mis necesidades? 

Si tu pareja no está dispuesta a trabajar contigo para satisfacer tus necesidades, puede ser una señal de que la relación no es saludable o no es sostenible a largo plazo. En este caso, es importante buscar ayuda profesional para explorar tus opciones y tomar decisiones informadas sobre el futuro de la relación.

Conclusión

Así que, queridos amigos, hemos recorrido juntos el camino para entender por qué a veces sentimos que nuestra pareja no nos da lo que necesitamos. Es como cuando compartimos un juguete con un amigo y a veces no lo comparte como queremos. Pero en lugar de juguetes, hablamos de sentimientos y amor.

Recuerda que cada persona es como un rompecabezas único, con piezas diferentes que encajan de maneras especiales. A veces, esas piezas no encajan perfectamente, y eso está bien. Lo importante es hablar con tu pareja y decirle cómo te sientes. Al igual que cuando dices «¡Hey, amigo, me gustaría jugar a esto también!».

La comunicación es como un superpoder en las relaciones. Cuando compartimos nuestros sentimientos y escuchamos a nuestra pareja, creamos puentes de amor y entendimiento. Además, ser amable y tratar de comprender los sentimientos de la otra persona nos hace crecer juntos, como plantitas que necesitan agua y sol para crecer fuertes.

A veces, las parejas necesitan ayuda extra, al igual que cuando le pedimos consejos a los adultos. Si sientes que las cosas son difíciles, no tengas miedo de decirlo. Los psicólogos como yo estamos aquí para ayudar, como los superhéroes de las relaciones.

Así que recuerda, hablar con amor, escuchar con cariño y pedir ayuda cuando lo necesitas. Las relaciones son como jardines que cuidamos juntos. Con paciencia y amor, podemos hacer que crezcan hermosas flores de felicidad y entendimiento.

¡Hasta la próxima aventura en el mundo de las relaciones!